ONIRICA

Este cigarrillo me mira como un cíclope
con su enorme ojo rojo
Yo en cambio lo miro
con dos que no hacen uno

El se queja crepitando
escupiendo ceniza sobre mi mesa.
Yo pienso en escribir algo
pero el humo abraza mis manos
y no me deja teclear.

Me señala un disco y ya entiendo

A mis puchos les gusta Spinetta.
Por ser hoy y solo hoy le daré ese gusto
A este cigarrillo
No al de ayer ni al de mañana.

Entonces me visto con fina ropa blanca
y me reflejo en las alas de un cisne en el agua
Me transformo en una hermosa dama azul
y mis dedos se convierten en mimbre
Viajo en la nave de fibra del Capitan Beto
Acepto la invitación de la azafata del tren fantasma
Veo volar a las golondrinas de plaza de mayo
y entiendo el lenguaje del cielo
Mientras bebo jugo de lúcuma
leo los libros de la buena memoria
Con el diluvio de la pasajera
riego al jardín de gente
Huelo a jazmín
Reconozco que el mar es de llanto
Meto los pies en el agua de la miseria
Dejo volar todas las hojas que son del viento
y sé que las cosas tienen movimiento
Practico la superchería
y me interno en el cementerio club
Salgo del estado de coma
Me convierto en un pequeño angel
y mi alma se vuelve de diamante

Es que al escuchar al Flaco
uno aprende a volar con las manos
y sueña despierto que toca con la boca
el suelo de azahar
Y si el licor no deja de beber
se pueden ver tigres en la lluvia.

Mi cigarrillo se fue a dormir y cierra su ojo brillante
Yo sigo en el valle de los duendes
con el corazón abierto
Como un durazno
Sangrando

Calíope-Mayo 2007